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Que ilusión hace cuando sabes que tienes una fiesta de disfraces. Te encanta pensar en el disfraz y en cómo vas a hacer para ser el invitado con el disfraz más original. Disfrutas al máximo de la compañía de tus amigos y te alucina subir fotos a las redes de selfies y fotos en grupo todos disfrazados. Pero al día siguiente… ¿Quién quiere dedicarse a lavar disfraces con manchas imposibles? ¡Pues tú! Porque nosotros te traemos los trucos más prácticos para que tu disfraz luzca como el primer día.
Antes de liarte la manta a la cabeza y ponerte a lavar como un loco, tienes que saber cómo puedes lavar tu disfraz y los productos que puedes utilizar.
Lo primero que te dejamos es una lista de iconos donde se explica qué significan esos jeroglíficos extraños que aparecen en las etiquetas de todas nuestras prendas de vestir.
Este paso no es obligatorio pero lo ideal es que también laves el disfraz antes de utilizarlo, de esta forma evitas rojeces o posibles alergias. La mayoría de los disfraces no permiten lavarlos a temperaturas muy altas, por ese motivo es bueno que siempre consultes la etiqueta si no quieres que tu disfraz nuevo salga de la lavadora con un tamaño perfecto para tu chiguagua «Pupi».
Lo más recomendado suele ser el lavado a mano o en seco. Si lo vas a lavar a mano lo ideal es sumergirlo en un barreño de agua tibia con detergente para prendas delicadas. Si el fabricante permite el uso de la lavadora lo puedes hacer en frío y con un programa delicado. La mayoría de los disfraces están hecho de fibras sintéticas y/o artificiales. Estas fibras son las que dan el color, la forma y el brillo a nuestro disfraz. Pero, como ya hemos dicho, estos tejidos son muy sensibles a las altas temperaturas, tanto en la propia limpieza como en el planchado. Por tanto, es conveniente siempre secar al aire y vaporizar para eliminar las arrugas que hubieran podido quedar.
Muchos de tus disfraces irán acompañados de una máscara de plástico, como por ejemplo, si te estás planteándon cómo hacer el disfraz de ladrón de La casa de Papel. Estas máscaras también necesitan una puesta apunto y hacerles un lavado de cara, nunca mejor dicho. Para lavar estas máscaras lo ideal es darles con un papel de cocina y limpiacristales. A continuación aclara el producto con ayuda de un paño humedecido en agua tibia ¡Quedará como nueva!
¡Qué pelazo lucias ayer en la fiesta! y hoy esa peluca estupenda parece un estropajo enmarañado en el fondo de tu habitación. No te preocupes porque puedes volver a hacer que recupere ese esplendor del primer día. Coge la peluca y sumérgela en un barreño de agua tibia y frótala con champú hasta que salga espuma. Aclara la peluca y péinala con ayuda de un cepillo. Después sécala con ayuda de una toalla, vuélvela a peinar y cuélgala para que se termine de secar.
Bien es sabido que no todas las manchas son iguales y que unas se resisten más que otras. Te dejamos consejos especiales para esas manchas que se niegan a abandonar este mundo.
Esperamos que todos estos consejos te ayuden a lavar disfraces sin ningún tipo de miedo para que así los puedas conservar durante mucho tiempo.
Y si tienes algún consejo, secreto familiar o «truquito» para lavar disfraces y dejarlos impolutos, no dudes en compartirlo con nosotros en nuestro Facebook